De acuerdo con el INEGI en México existen alrededor de 6,238 organizaciones activas bajo la categoría de asociaciones , organizaciones y cámaras de productos, comerciantes y prestadores de servicios.
Derivado de lo anterior, los organismos empresariales deben desempeñar un rol que permita a sus asociados obtener un mayor valor agregado, donde se vele por sus intereses, mediante acciones colectivas, dichas acciones deben generar, economías de escala, acelerar los procesos de aprendizaje y fortalecer el poder de negociación de las empresas que pertenecen a estos organismos que les permita crecer económicamente.
Actualmente estos organismos se desarrollan con base en cinco ámbitos de acción:
- Representación gremial de acuerdo con los intereses de sus afiliados.
- Previsión de servicios técnicos que apunten a diferentes áreas del desarrollo de las empresas.
- Construcción de capacidades en relación con su entorno.
- Participación en el diseño de políticas entre el sector publico y el sector empresarial.
- Promoción de estrategias locales en un proceso participativo en el cual los actores de una localidad definen una visión a futuro.
Estos organismos deben ser promotores de cambios, impulsando principalmente a las MiPyMES.
Las estrategias a desarrollar deben ser el resultado del dialogo y compromiso conjunto de todo el entorno, gobierno, educación y tecnología.
Los esfuerzos individuales de pertenecer a un organismo empresarial deberán verse reflejados en una visión compartida, que deberá dar como resultado un alto grado de competitividad elevando la productividad de las empresas afiliadas, lo anterior, a través de mayores recursos y alternativas para innovar, generar crecimiento e incentivar a las empresas a invertir, cuidando el medio ambiente, estableciendo códigos de ética, inclusión e igualdad, generando empresas.